Presentación Oficial de MARI JALEOS

Esta chica tan salerosa, se llama Mari Jaleos,al igual que Irina, también tiene su historia. Para dar cuerpo y alma a esta ilustración, me basé principalmente en una buena amiga, que tiene una peculiar visión de la vida pese a su juventud, con las ideas muy claras. Gasta un toque bohemio, pero al mismo tiempo romántico y único. Pero, he de añadir, que la Jaleos, es un envoltorio donde están absolutamente todas las mujeres, jóvenes y mayores, aventureras, clásicas, rockeras, artistas, madres, amantes, tímidas...No hay una sola que no esté reflejada en ella. Lo iréis comprobando poco a poco.
Algo que caracteriza a Mari Jaleos, es una especie de amuleto, que siempre lleva puesto: sus zapatos rojos de sevillana, y aunque ella no es del sur, ni del norte, sino de todos los sitios, éstos hacen que sea apasionada en cualquier empeño.
Ella es la imagen de próximas creaciones de ropa y complementos, en breve, los pondré en el blog.
Espero que os divirtáis con ella.

Despedida al pasado

Irina giró la cabeza, sabía que en algún momento esto iba a suceder. Tenía que despedirse de esa parte del  pasado que tanto le había hecho sufrir, debía dejar de aferrarse a recuerdos que le hacían daño, pero...pensó que era difícil separar los dos opuestos, lo bueno de manera innegable estaba unido a lo malo. Las vivencias bonitas, también tenían una carga de pena.
De sus ojos,  resbalaron lágrimas, de despedida, pero también de comienzo. En su interior, algo fuerte, poderoso le dijo: "debes mirar hacia adelante si quieres recuperar el corazón que una vez encerraste en una jaulita, lo que dejas atrás, ese  dolor de la pérdida, se convierte ahora en esperanza para un nuevo caminar"
Volvió la cabeza hacía adelante, y se puso en marcha.
(Mannaz)

Siempre esperando

Irina se encontraba sentada delante de la ventana esperando no sabía qué. Se quedó absorta en sus pensamientos...¿por qué los humanos siempre estamos esperando algo? Esperamos el autobús, una llamada, una carta, una mirada, un empleo, la nómina a final de mes, un bebé, esperamos en la cola del mercado, del cine...esperamos que nos quieran, que nos miren, no sufrir, que nos acepten...hasta que llega un momento que esperamos no perder la esperanza...
Decidió no esperar más, vivir cada instante y pasar a la acción. Seguídamente se metió en la cama y soñó que la acunaba el mar y que las estrellas estaban de su lado.
(Mannaz)

Lluvia en la piel

Irina se encontraba en su pequeño sillón ojeando una revista, cuando se percató de que había comenzado a llover. Mientras contemplaba el panorama exterior, una idea le vino a la cabeza como una necesidad que le
quemaba, y se dijo ¿por qué no?. Salió a la calle, alzó la cabeza, cerró los ojos y levantó las manos hacia el
cielo...Dejó que el agua cayera sobre su piel, sobre su cara...era agradable notar las gotas deslizandose por sus brazos. Se mantuvo así durante un rato, ajena a lo que ocurría a su alrededor...Sólo podía ser parte de lo que estaba ocurriendo...y se volvió lluvia por unos instantes.
(Mannaz)

GRACIAS A TODOS !!!!!

Irina y yo, hemos tomado juntas hoy un té, y despues de una charla animada y profunda, se ha decidido a sincerarse... no esperaba tanta aceptación, y le ha pillado un poco por sorpresa tener seguidores y gente que la apoye en sus reflexiones, a veces un tanto melancólicas, se disculpa por ello.
En su nombre, me gustaría transmitir un infinito agradecimiento a todos los que la van siguiendo, la comprenden, la animan, la quieren...que se ponen en su piel e intentan sentir lo que ella describe. Reconozco que algunas veces Irina es un poco hexaespiritual, pero al fin y al cabo, es una esencia primitiva en ella, es lo que realmente la hace libre, el resto, se detetiorará con el tiempo, con los años, con los vientos...
Gracias a todos! Irina os desea lo mejor!

La música del alma

Cogió delicadamente el viejo violín, respiró profundo y dejó su mente y su alma libres de cualquier pensamiento.
De repente sus manos se pusieron en movimiento, y comenzaron a flotar notas, unidas armoniosamente, que llenaron todo el espacio donde Irina se encontraba, salieron por la ventana, se colaron en las casas, revolotearon por los parques, llegaron a los oídos de los enamorados, de los solitarios, de los niños y ancianos, y todos ellos sintieron como algo por dentro cambió. Se sintieron plenos.
No era otra cosa, que la música que desprendía el alma de Irina.
(Mannaz)

El mundo en el cabello

Mirándose al espejo, se dió cuenta de que todas la experiencias vividas y sentimientos acumulados, se iban reflejando poco a poco a en su larga cabellera. El negro de la noche, donde la oscuridad te absorve y a veces no te deja dormir; el azul del mar, su aroma, que libera la mente y el alma hacía viajes infinitos; el violeta de algunos ocasos, que enamoran los sentidos; el verde de los campos, de sus hierbas, que refrescan el cuerpo mientras caminas descalza sobre ellas; el rojo de las pasiones, esas que a veces son feroces, primitivas y que nos guían sin criterio; el naranja de un amanecer, que te une y te conecta con el Todo; el amarillo del otoño, suave, tranquilizador y armonioso.
Irina, se tocó el cabello suavemente, cerró los ojos,  y volvió a notar todas esas sensaciones. Y se sintió completa.
(Mannaz)

Telarañas en la cabeza

Mientras Irina viajaba en el autobús de camino al centro de su ciudad, se embelesó mirando a las

personas que transitaban las calles. ¿Cúantos de ellos eran conscientes de sus pensamientos y sensaciones

en ese preciso instante? La prisa, la responsabilidad, las relaciones, el miedo, la razón...todo eso hacen que

nuestros sentimientos queden presos dentro de nosotros mismos, sin percatarnos que ese es el único lugar

donde podríamos ser infinitamente libres.

Después de esas reflexiones, bajó del bús, y comenzó a notar, el aire frío en su cara, el fuerte suelo bajo

sus pies, el calor de otras manos que le rozaban al pasar. Y se sintió feliz.

(Mannaz)

La Menina Irina

Mientras se vestía, Irina se preguntó, ¿qué mujer no querría ser la inspiración de una canción, la princesa de un cuento, la musa de un pintor...? Sonrió, y salió a la calle cumpliendo el deseo de tantas y tantas mujeres. Se puso su gran vestido, y se sintió libre.

Ilustración Corazón Preso

Irina abrió la pequeña jaulita, metió su corazón, se miraron fijamente durante un largo tiempo, ella, por fin,

rompió el silencio:

-no me guardes rencor por dejarte aquí, pero ahora me dueles demasiado, y necesito dejarme llevar

por el vacio para poder tenerte dentro de nuevo.

Le dió un beso lleno de amor y ternura, y se giró dándole la espalda. Pronto se volverían a encontrar.

(Mannaz)